mis dos primeras horas en Santiago...

10/09/2010

Toqué la puerta, intenté abrir la puerta y no pude. Renata se levantó, creo que aún somnolienta... abrió la puerta y le dije: “Hola, soy tu compañera de cuarto”... No sé si ella me entendió mucho, solo se fue a la cama de nuevo. No pasaron muchos minutos para que mis ganas de hablar me hicieran preguntarle dónde quedaba la ORE (Oficina de Relaciones Exteriores), la facultad de Ciencia Política (ella estudia Ingeniería Química... cómo lo sabría? sí que estoy loca), el centro de la Ciudad, la Catedral. Tenía tantas preguntas, tantas ansias que no sabía ya qué más preguntar. Las primeras indicaciones después de las geográficas fueron, entre muchas, que no desempacará pues habría un re-sorteo de habitaciones (hubo como unas 5 horas después y me pasaron a la habitación que ocupo ahora)

Renata, además, muy amablemente me dio un mapa para ubicarme. Debo confesar que soy una persona que muy fácilmente se ubica con mapas... y pensé que así lo haría con este mapa... Decidí entrar al baño y darme una ducha. Renata salió mientras yo me bañaba y me dijo que nos veríamos más tarde.

Cuando salí del baño vi en su mesa de noche unas fotos de ella con un chico, supuse que sería su novio y que estaba sintiendo las saudades.

Me vestí, no pensé mucho en el clima... cuando salí a la calle sentí frío! :( Estaba en vestidos cortos y sandalias... La gente estaba básicamente como yo; sin embargo, no parecían sentir frío. Caminé hacia el primer edificio que vi (que parecía como un anfiteatro estilo colonial)... pregunté (con mapa en mano) y un señor me dijo: “ese mapa no te va a servir, camina a la siguiente cuadra y encontrarás una oficina de orientación a estudiantes”.

(Nota: Los españoles, en general, cuando no saben alguna dirección te dicen: “camina hasta la esquina y vuelves a preguntar”).

Efectivamente, llegué a esta oficina y me dieron un nuevo mapa y me dijeron: “si no entiendes cómo llegar, anda preguntando en el camino”...

Yo, creyéndome muy sabionda, pensé que me ubicaría muy rápido con el mapa... pero no... di mil vueltas, lo ponía al revés, al derecho y no sabía dónde estaba...

Y sí: llegué preguntando...